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El Racing de Ferrol-Real Oviedo de la jornada 23 de Segunda División, que se disputaba desde las 21:00 horas de este sábado en A Malata, estuvo detenido durante casi veinte minutos tras una indisposición de un trabajador de seguridad. El encuentro fue interrumpido cuando ambos equipos estaban a punto de afrontar el último cuarto de hora de juego al ser necesaria atención de urgencia a una persona en el entorno de la grada de Fondo Norte.
El afectado fue trasladado a un centro sanitario en una ambulancia, que accedió al campo desde la zona de Fondo Sur y cuya entrada al punto en el que estaba el trabajador fue facilitada por los jugadores de ambos equipos. Los futbolistas arrastraron las vallas de publicidad para dejar espacio al vehículo de asistencia.
El parón llevó al colegiado, el cántabro Adrián Cordero Vega, a prolongar el encuentro otros diecisiete minutos una vez que se llegó al 90, ya que la cita, en la que los ovetenses ganaban por 1-2, no se reanudó hasta el minuto 86.
El club verde ha comunicado que el duelo «se detuvo para que fuese atendido un miembro del dispositivo de seguridad», que fue enviado «ya consciente en ambulancia a un centro hospitalario» y al que ha deseado «una pronta recuperación». El encuentro lo ganó el Oviedo (1-3).
